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Viajemos en el tiempo, cinco o seis años en el futuro. Si usted estuviera leyendo este post, ¿se imagina leyéndolo o viéndolo? Según CISCO, en 2017 el tráfico de vídeos online se triplicará  y representará el 69% del consumo en Internet.

El vídeo es el futuro del marketing de contenidos. También es la herramienta más potente conocida hasta el momento para satisfacer las necesidades de información y entretenimiento del público. Las empresas que no prevean y perciban este potencial  para su estrategia de marketing deben saber que asumen un riesgo. El riesgo de no estar a la vista. El viejo adagio que asegura que una imagen vale más que mil palabras ha sido actualizado por la empresa de investigación de mercado Forrester Research que afirma que, un minuto de vídeo vale 18 millones de palabras.

Las cifras son contundentes: Youtube recibe más de un billón de visitantes únicos al mes, mucho más que cualquier otro canal, excepto Facebook. Por ejemplo, uno de cada tres británicos ve al menos un vídeo online a la semana, lo que supone una audiencia semanal de más de 20 millones de personas solo en el Reino Unido. Con estos datos y según la consultora Nielsen, los expertos en marketing aseguran que el vídeo dominará sus estrategias en los próximos años.

En DOYOU conocemos el potencial del vídeo como herramienta de comunicación, como medio para comunicar una idea, un producto, un concepto. Desde el más sencillo al más complejo.

La evolución de una empresa…

… la trayectoria de un atleta…

… un evento…

… el trabajo de un colegio profesional…

… o el atractivo de una ciudad…

En la era de la sobrecarga informativa es vital para las empresas –grandes, medianas y pequeñas- ofrecer contenidos de asimilación sencilla, que potencien el engagement con el cliente, que obliguen al espectador a permanecer más tiempo en una web y que contribuyan el éxito de una campaña de social media o de un ejercicio de SEO. Para todo esto, una buena historia contada a través de un vídeo se convierte en una herramienta de impacto y un valor añadido para cualquier marca que apueste por el diálogo, la influencia y la reputación.

 

Fuente: The Guardian.